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RETOS Y CONTEXTOS : EL RETO DE RELACIONAR LA CONSTRUCCIÓN OCCIDENTAL DE LA CULTURA DIGITAL CON LOS CONOIMIENTOS ANCESTRALES Y AUTÓCTONOS
¿Qué actitudes culturales estamos transmitiendo con las TIC? Tecnologías de la Información y la Comunicación para la Interculturalidad comporta una involucración de las manifestaciones culturales, expresiones y sistemas de conocimiento tradicionales con las tecnologías interconectadas y digitales. Esto conduce a una serie de observaciones sobre la cultura digital.
Primero, cualquier implicación de tecnologías digitales no significa el simple cambio de una forma de producción cultural y existencia análoga, a una forma de producción cultural y existencia digital.
Segundo, las tecnologías asociadas con la cultura digital aportan modos radicalmente nuevos de articular y elaborar la experiencia vivida (Steven Shaviro, 2010). Por un lado, la cultura digital comunica valores de expresión individual, contemporaneidad y progreso; por otro lado, la cultura digital es portadora de un entramado de continuidades, discontinuidades, transiciones, prácticas e ideales que en su mayoría no presuponen consenso.
Tercero, la cultura digital no tiene una forma única, más bien es una referencia para el proceso a través del cual individuos y comunidades usan las tecnologías digitales y se relacionan a través de ellas. Este uso ha evolucionado a través de una diversidad de formas y campos que incluyen: la cibercultura, la realidad virtual, la inteligencia colectiva, los medios sociales, marketing 2.0, e-cultura, e-gobierno, e-educación... etc.
Cuarto, la cultura digital no significa una actividad o proceso singularizado, sino que denota un entorno con calidades transitorias y una sensibilidad de libre fluctuación cuyas concepciones y visiones han de poder dar paso a interpretaciones abiertas, idealmente no restringidas a convenciones o tendencias.
Lo que la interculturalidad puede aportar a la cultura digital es un conjunto de normas y protocolos diferentes para el diálogo, la comunicación y un estado de convivencia que permite afrontar creativamente el choque de culturas (INDEPA,2010). En la Convención para la Diversidad de las Expresiones Culturales de la UNESCO, la interculturalidad es definida como "la presencia e interacción equitativa de diversas culturas y la posibilidad de generar expresiones culturales compartidas, adquiridas por medio del diálogo y de una actitud de respeto mutuo". Igualmente la interculturalidad es un proceso social de comunicación, un proyecto común, una estrategia de desarrollo, un espacio de representación e interlocución. El grado en que la interculturalidad pueda ayudar a cumplir el reto de relacionar la cultura digital con los conocimientos ancestrales y autóctonos, se hallará en su potencial de articular y establecer situaciones que requieren y reclaman, en palabras de Marshall McLuhan (1977), diálogo más que autoexpresión, lo cual puede interpretarse (en la terminología de la interculturalidad) como "el derecho a la diferencia y al reconocimiento del pluralismo cultural", más que "yo soy el mensaje".
